A mi mujer le gusta un espejo vintage de la marca Camel. Todavía no sé lo he dicho pero tampoco me hace demasiada gracia porque el tabaco no es algo a lo que yo me quiera asociar. Para ella tiene otro valor: uno nostalgico. Su padre ha trabajado durante años para la marca y este espejo estaba colgado en la casa de su infancia. Asocia momentos de felicidad que le dan un valor especial a ese objeto que para mi es imposible de tener porque no comparto los mismos recuerdos. Para mi es simplemente esto: un espejo de una marca de tabaco y punto.
Son las historias que le dan valor a las cosas no su funcionalidad o aspecto.
Foto de Adobe Stock