Aunque tal vez no sea por altura corporal. No permitas que nadie te diga lo contrario. No hace falta que tengas millones de euros en tu cuenta bancaria, que hayas batido récords del mundo, que hayas logrado paz para el mundo, etc.
Lo estás dando todo para los tuyos para seguir adelante. Cada día te esfuerzas al máximo para que los que te rodean estén lo mejor posible. No te preocupa tu propio bienestar. Eso realmente es ser grande. No hace falta más para serlo. De hecho te sobra altura. No permitas que nadie te diga lo contrario.
Foto de Adobe Stock | @Roman Grandke