Aplica a diario esto: primero lo importante, luego lo urgente. Si te dejas llevar demasiado por las emociones tarde o temprano se te aplicará el dicho que ya conoces.
“Pan para hoy, hambre para mañana.”
Aplica a diario esto: primero lo importante, luego lo urgente. Si te dejas llevar demasiado por las emociones tarde o temprano se te aplicará el dicho que ya conoces.
“Pan para hoy, hambre para mañana.”