Una persona que es amable contigo no tiene que ser necesariamente un enemigo. No bajes la guardia demasiado rápido con personas que igual pueden a llegar tener intereses opuestos a los tuyos. Explora la verdad poco a poco. En ocasiones encontrarás realmente un amigo/o pero en otras ocasiones también te darás cuenta que lo que se te ha presentado inicialmente como tal en realidad es todo lo contrario.